Así estamos consternados rabiosos aunque esta muerte sea uno de los absurdos previsibles
da verguenza mirar los cuadros los sillones las alfombras sacar una botella del refrigerador teclear las tres letras mundiales de tu nombre en la rígida máquina que nunca nuca estuvo con la cinta tan pálida
vergüenza tener frío y arrimarse a la estufa como siempre tener hambre y comer esa cosa tan simple abrir el tocadiscos y escuchar en silencio sobre todo si es un cuarteto de Mozart
da vergüenza el confort y el asma da vergueza cuando tú comandante estás cayendo ametrallado fabuloso nítido
eres nuestra conciencia acribillada
dicen que te quemaron con qué fuego van a quemar las buenas las buenas nuevas la irascible ternura que trajiste y llevaste con tu tos con tu barro
dicen que incineraron toda tu vocación menos un dedo
basta para mostrarnos el camino para acusar al monstruo y sus tizones para apretar de nuevo los gatillos
así estamos consternados rabiosos claro que con el timpo la plomiza consternación se nos irá pasando la rabia quedará se hará mas limpia
estás muerto estás vivo estás cayendo estás nube estás lluvia estás estrella
donde estés si es que estás si estás llegando
aprovecha por fin a respirar tranquilo a llenarte de cielo los pulmones
donde estés si es que estás si estás llegando será una pena que no exista Dios
pero habrá otros claro que habrá otros dignos de recibirte comandante.
12 comentarios:
Me tope con tu blog y me resulta interesante. Saludos!!
venía a decir exactamente eso
besos
Sólo nos queda decir aquello que dijo García Lorca por Ignacio Sánchez Mejías: "También se muere el Mar".
Que(gran)amenaza para la vida (esta muerte)
saludos
Se detendrán las funciones orgánicas ... pero nunca la esencia la cual muere cuando es olvidada... Benedetti, nunca morirá...
CONSTERNADOS, RABIOSOS
Así estamos
consternados
rabiosos
aunque esta muerte sea
uno de los absurdos previsibles
da verguenza mirar
los cuadros
los sillones
las alfombras
sacar una botella del refrigerador
teclear las tres letras mundiales de tu nombre
en la rígida máquina
que nunca
nuca estuvo
con la cinta tan pálida
vergüenza tener frío
y arrimarse a la estufa como siempre
tener hambre y comer
esa cosa tan simple
abrir el tocadiscos y escuchar en silencio
sobre todo si es un cuarteto de Mozart
da vergüenza el confort
y el asma da vergueza
cuando tú comandante estás cayendo
ametrallado
fabuloso
nítido
eres nuestra conciencia acribillada
dicen que te quemaron
con qué fuego
van a quemar las buenas
las buenas nuevas
la irascible ternura
que trajiste y llevaste
con tu tos
con tu barro
dicen que incineraron
toda tu vocación
menos un dedo
basta para mostrarnos el camino
para acusar al monstruo y sus tizones
para apretar de nuevo los gatillos
así estamos
consternados
rabiosos
claro que con el timpo la plomiza
consternación
se nos irá pasando
la rabia quedará
se hará mas limpia
estás muerto
estás vivo
estás cayendo
estás nube
estás lluvia
estás estrella
donde estés
si es que estás
si estás llegando
aprovecha por fin
a respirar tranquilo
a llenarte de cielo los pulmones
donde estés
si es que estás
si estás llegando
será una pena que no exista Dios
pero habrá otros
claro que habrá otros
dignos de recibirte
comandante.
Montevideo, octubre 1967
nuestra venganza es sobrevivir .*
dije ya ¡Mierda!?
Mario Benedetti NO ha muerto. Lo que es más: No morirá jamás.
Estoy con apneica...Mario no morirá jamás.
¡Muchachas!, no morirá, sólo digo que se ha ido su sombra.
se nos fue pero aún queda.
queda él y más allá de lo que fue.
y quedamos nosotros
los poetas solos
redundando siempre la soledad
abrazo poeta, poeta
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